Apoyo al proceso de evaluación

La tasación de una vivienda es un paso fundamental a la hora de comprar, refinanciar o vender una propiedad. Determina el valor justo de mercado de la vivienda y garantiza que el precio se ajuste a su estado, ubicación y características. Si bien el proceso está en gran medida fuera de su control, comprender cómo funciona y preparar su propiedad puede marcar la diferencia.

¿Qué es una tasación de vivienda?

Una tasación de una vivienda proporciona una evaluación imparcial y profesional del valor de una propiedad. Las tasaciones, que suelen requerirse en transacciones que involucran una hipoteca, ayudan a los prestamistas a asegurarse de que no están prestando más de lo que vale la propiedad. Los compradores, vendedores y refinanciadores confían por igual en las tasaciones para asegurarse de que las decisiones financieras estén bien informadas.

Los costos de una tasación suelen oscilar entre $300 y $450, aunque esto puede variar. Los tasadores evalúan factores como las ventas recientes de propiedades similares, las tendencias actuales del mercado y el estado de la vivienda. Realizan una inspección exhaustiva y anotan características clave como los metros cuadrados, la distribución y cualquier reparación o mejora que pueda afectar el valor.

Cómo prepararse para la tasación de su vivienda

Aunque algunos factores, como las condiciones del mercado y la ubicación, están fuera de su control, puede tomar medidas proactivas para garantizar que su propiedad sea evaluada favorablemente:

  1. Mejore el atractivo exterior
    Las primeras impresiones son importantes y el tasador comenzará a evaluar su casa desde el exterior. Mantenga el césped ordenado, retoque la pintura exterior y elimine el desorden. Estos pequeños esfuerzos pueden influir positivamente en la primera impresión del tasador.
  2. Pula el interior
    Una casa limpia y bien cuidada deja una mejor impresión. Limpie profundamente el espacio, solucione el desgaste visible en alfombras y pisos y retoque las paredes. Preste especial atención a las áreas de alto impacto, como las cocinas y los baños: limpie las encimeras, pula los electrodomésticos y solucione problemas menores. Ordenar o guardar temporalmente el exceso de muebles también puede hacer que las habitaciones parezcan más espaciosas.
  3. Resalte las mejoras recientes
    Comparta cualquier mejora, como electrodomésticos nuevos, sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado actualizados o renovaciones recientes. Es posible que los tasadores no sepan automáticamente sobre estos cambios, por lo que proporcionar una lista puede ayudar a garantizar que su inversión se tenga en cuenta en la valoración.
  4. Abordar los problemas estructurales o los daños
    Las reparaciones de techos, ventanas o revestimientos pueden aumentar el valor de su casa, mientras que los daños visibles o los materiales obsoletos (como el amianto o la pintura a base de plomo) pueden reducirlo. Además, asegúrese de que su casa esté libre de plagas, ya que las infestaciones o los daños causados ​​por termitas pueden afectar significativamente su tasación.
  5. Reconozca los posibles desafíos
    Las viviendas singulares o rurales pueden enfrentar desafíos de valuación debido a la falta de propiedades comparables. Si posee una vivienda de este tipo, proporciónele al tasador la mayor cantidad de información de respaldo posible, como ventas recientes en áreas cercanas.

Por qué es importante

Para los compradores y los prestamistas, una tasación garantiza que el precio de compra coincida con el valor de la vivienda. Para los vendedores, una tasación sólida facilita una transacción sin inconvenientes. Y para quienes refinancian, confirma el valor actual de la propiedad, lo que puede afectar las condiciones del préstamo.

Al abordar problemas comunes, realizar actualizaciones bien pensadas y presentar su propiedad en su mejor estado, puede ayudar a garantizar una tasación favorable y una transacción sin problemas.